Los Escribas

De causalidad, si es que existe, encontré en la TV un documental dedicado a Adolfo Bioy Casares. El sonido era pésimo, el camarógrafo movía tanto la cámara que parecía ebrio en plena grabación de un cumpleaños de 15.

Cabe aclarar que particularmente es un autor que me gusta y he leído. Por eso, mas allá de la calidad de lo que estaba mirando, no quería perderme sus palabras en voz alta.

De toda la entrevista me quedó grabada una frase que según Bioy, Borges siempre mencionaba cuando escribían juntos, "Qué descansado es escribir con otro". "Una lección a la soberbia", acota Bioy cuando termina de mencionar la frase de su amigo, en fín...

Automáticamente comencé a pensar en los textos compartidos. En el sentido de leerse, el deseo de comprender las palabras y comprenderse a sí mismos cada vez que lo llevamos acabo. ¿Acaso no es leer a otro el acto mismo de leer un libro, un texto, un ensayo, pensamientos? Alguien lo escribió, alguien recortó ese pedazo de la realidad y tuvo la suerte de saber transmitirlo en palabras.

Sin olvidarme de mi curiosidad por entender en qué pensaba el escritor cuando redacta sus textos, me preparé para el largo viaje al oeste. Agarré un libro de historias breves de Cortázar, un abrigo y emprendí mi viaje.

La estación estaba llena de caras madrugadas, niños de todas las edades y gente que corría, inclusive un día domingo. El tren se retrasó media hora por razones que desconozco, pero estaba vacío, así que me senté junto a la ventaba mientras el sol calentaba mi falda y me puse a leer.

Una de las Historias de Cronopios y de Famas, hablaba sobre el tiempo. Imaginé que el autor se empecinaba en explicarme lo inutil que le parecia el reloj, estar pendiente del tiempo, la ansiedad, el "autoapuro" para llegar a ningún lado. La misión de construir al tiempo con nuestras acciones.

En ese momento entendí que leo porque lo necesito, porque me fascina, porque no paro de construir imágenes, historias, reflejos, personajes. Entendí que vale la pena cada sonrisa que desato en un relato divertido, y cada exaltacion que me provocan ciertas frases.

No hay comentarios: